El mejor sitio para tomar fotos es el Kremlin. Quizás no sea el más representativo de la ciudad pero sí de los más bonitos. Donde más disfrutaremos en este sentido es en el complejo arquitectónico de la plaza de la Catedral. En este sentido, hay que tener en cuenta que hay ciertas restricciones. Resulta que en el interior de estos templos no está permitido tomar fotografías. No obstante, algunas personas son osadas y lo consiguen. A veces, el truco reside en la naturalidad con la que se hacen las cosas.
También son llamativas las muchas y variadas estaciones de metro de la ciudad. En general, estamos acostumbrados a ver cierta homogeneidad en otras redes del suburbano. Pero en este caso, cada estación es un mundo diferente. Eso llama mucho la atención a los turistas ávidos de tomar instantáneas de cualquier sitio.
Desde el Río Moscova, a bordo de alguno de los barcos que surcan sus aguas, podemos obtener grandes fotografías. Se pueden conseguir ángulos casi imposibles. Lo mismo sucede si subimos a alguna de las torres que pueblan Moscú. Por lo tanto, preparen sus cámaras y teléfonos.